Modesto Ruiz era nuestro abuelo, hombre sencillo que nunca llamaba la atención, que le daba importancia al otro y así entendió su vida. Cómo un servicio a los demás. Saber emprender fue otra de sus cualidades, así que creo que esta parte la hemos heredado de él.
Hizo muchos negocios y uno de ellos fue crear su propio aceite al que llamó “Fragancia”, no sé por qué eligió ese nombre, ojalá pudiera preguntarle, pero por desgracia falleció cuando nosotras éramos pequeñas. Para mí, es un nombre con elegancia, como la que él tenía.
Además de este aceite, que seguro era exquisito, y que es del año 1.956 sabemos que exportó aceite a Francia, Inglaterra y Portugal, y que junto con su hermano Agustín hizo otro aceite al que llamaron “Gladiador”. Desde luego que sentimos un profundo orgullo por su trabajo y esfuerzo. Una parte de su fuerza aún nos llega incluso a nosotras.
OROBEIO tiene mucho de él porque amar la naturaleza es algo que aprendimos desde muy niñas y porque él hizo que nuestra infancia en la campiña Cordobesa fuera muy feliz. Además, cada año durante la recogida de aceituna (octubre- diciembre) él nos enseñó a “catar” distintas variedades de aceite y gracias a su hacer hemos podido conseguir el mejor AOVE OROBEIO mezclando las mejores variedades de aceitunas en el momento óptimo de maduración.
Este es un pequeño homenaje a él y a su recuerdo. Y el sabor que compartimos con todos vosotros a través de nuestro aceite y productos, su homenaje constante.
Os dejamos un enlace a nuestro pack de aceite, para que disfrutéis en casa como os merecéis.
Gracias por estar ahí.
Pilar y Marta.